Con una belleza impactante y un talento innegable, Elizabeth Taylor cautivó al público. Como actriz infantil precoz y protagonista inolvidable, interpretó personajes femeninos legendarios que encarnaban la fuerza, la integridad y la feminidad sin complejos. Su carrera, que abarcó seis décadas, le valió cinco nominaciones al Oscar y dos victorias como mejor actriz. Además de su singular talento, Elizabeth era una hábil mujer de negocios. Su sentido instintivo de su propia valía la llevó a negociar el primer contrato de un millón de dólares para una actriz por su papel en Cleopatra. También fue la primera celebridad en lanzar una marca de fragancias de éxito y se convirtió en la primera mujer emprendedora social. A lo largo de su vida, Elizabeth poseyó una permanente voluntad de supervivencia frente a la tragedia personal y una extraordinaria capacidad de amar.
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