Y como todo lo que tiene que ver que nuestra salud está relacionado directamente con la alimentación, queremos señalar que podría ayudarnos a mantener sano y fuerte nuestro cabello.
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Frutos secos, nos ayudarán con la elasticidad y crecimiento del cabello, a través de los acites que poseen, ya que sin ácidos grasos en tu cuerpo, el cabello se romperá fácilmente.
Espinacas, una alimentación deficiente en hierro, es la segunda causa de pérdida de cabello y la más fácil de tratar, esta es rica en hierro, vitamina C y ácido fólico lo que mantiene sano los folículos pilosos del cuero cabelludo.
Ricas en betacaroteno las zanahorias, también contienen vitamina A que contribuye a la formación de nuevas células y a mantener los ácidos grasos de cada célula que sostienen el cuero cabelludo.
El yogurt griego, a través del contenido de proteína y vitaminas B5 y D que favorecen el cabello y folículos.
Huevos, son una excelente fuente de vitamina D, proteínas y grasas, por lo que siempre debe estar presente en una dieta saludable.
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Los cambios en tu cabello, así como en otros aspectos externos se notarán luego de seis meses de estar consumiendo dichos alimentos, no es necesario que gastes una fortuna para lucir un cabello fuerte, aunque es importante, que descartes otras causas que puedan estar ocasionando la caída de tu cabello y a la vez comprometiendo tu salud.
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