Se trata de una especie de "uñas postizas" de lo más variadas que te permiten obtener una manicura instantánea y perfecta sin necesidad de esperar a que se seque el esmalte o en su caso, el pegamento.
Tienen un brillo espectacular que hace que el acabado se asemeje al de los esmaltes en gel, que tan de moda están, pero con la tranquilidad de que tu uña no va a sufrir ningún daño y de que en una semana puedes volver a estrenar nueva manicura.
La duración aproximada de la manicura es de una semana, siempre y cuando sea correctamente aplicada (con la uña limpia y ligeramente exfoliada). Una vez quieras retirarlas, basta simplemente con tirar ligeramente desde los lados, haciendo presión hasta soltarlas o bien, aplicar quitaesmalte y dejar actuar durante un minuto.
Como ves, una forma fácil, rápida y cómoda de llevar auténticas manicuras de salón de belleza en cuestión de pocos minutos!
Podéis elegir un tono homogéneo y clásico para toda la manicura, o bien alternativas más atrevidas con dibujos, purpurina, piedras, etc...o un combo entre ambas, dejando la mayoría de las uñas en tonos lisos y alternando alguna más llamativa.
Para mí no hay forma más sencilla de llevar una manicura perfecta en ocasiones especiales y sorprender a todo el mundo con las diferentes y divertidísimas opciones entre las que podemos elegir.
Para que veáis que se trata de un método rápido y de lo más fácil de aplicar, os dejo un vídeo demostrativo que os terminara de animar a probar estas press-on nails.
¿A qué son una maravilla?
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