Ciertamente, los colores son una parte importante cuando se trata de dar una primera impresión, ya que tienen la capacidad de conferir un toque personal. A través de los colores seremos capaces de comunicar más sobre nosotros mismos desde un primer momento, gracias a que, inconscientemente, la mayoría tendemos a fijarnos en el color antes que en otros aspectos.
Se trata de una forma muy refinada de comunicar información acerca de nosotros, aunque debemos tener en cuenta que la interpretación de los colores es subjetiva y siempre estará sujeta al criterio personal. No obstante, podemos seguir algunas pautas generales que nos ayudarán a ofrecer una combinación de colores interesante y agradable a la vista de todos.
En primer lugar, debemos tener en cuenta el riesgo de usar pocos o demasiados colores. Y es que la utilización de muchos colores puede resultar excesiva y, en ocasiones, solo conseguiremos causar una mala impresión. En el otro lado, el uso de solo unos pocos colores puede hacer que su estilo resulte aburrido; aunque esto no siempre tiene que ser así, ya que un look sobrio puede ser elegante y agradable a la vista.
Por otra parte, algo que puede ayudarnos a elegir correctamente los colores que usamos es la regla de los tres colores. Mediante esta regla combinaremos un color primario (el principal del conjunto), uno secundario (que será el segundo color más utilizado y deberá ser parecido al principal, o al menos combinar bien con éste), y el de realce (que generalmente contrasta con los otros dos y se utilizará para enfatizar ciertas partes del atuendo).
Por último, una herramienta que nos será muy útil es la rueda de colores, que resultará muy práctica para combinar los tonos de una manera que sea agradable para todos. La rueda de color se utiliza en cualquier campo creativo para mezclar y combinar colores, y consiste en la representación equilibrada de colores, divididos en tonos fríos y cálidos.
Aunque hay personas que saber elegir los colores correctos por instinto, esta rueda es muy útil para aquellos que no saben cómo hacerlo. Si utilizamos la rueda de colores como guía, podemos encontrar las siguientes combinaciones con las que siempre acertaremos:
1. Colores que se encuentran uno junto al otro: como por ejemplo, amarillo y amarillo-naranja; amarillo y amarillo-verde; violeta y azul-violeta, etc.
2. Colores que forman un ángulo de 90 grados: amarillo y rojo-naranja; azul y violeta-rojo; verde y naranja, etc.
3. Colores que se encuentran uno frente al otro: como amarillo y violeta; azul y naranja; rojo y verde, etc.
4. Colores que forman una T: azul, naranja y rojo violáceo; amarillo, violeta y rojo-naranja; amarillo, azul-verde y rojo-naranja, etc.
5. Colores en forma de X (es decir, azul, naranja, violeta-rojo, y amarillo, violeta, azul-verde, y rojo-naranja, etc.)
FUENTE: Lutasha