Lo primero y más básico: las chicas altas y con un cuello largo, podrán llevar pendientes más grandes y largos que las bajas y con cuello corto. Sobre todo si tienes poco cuello, unos pendientes enormes recargarán demasiado tu imagen.
Si tu rostro es ovalado, enhorabuena porque te sentarán bien todo tipo de pendientes. Sólo deberás tener en cuenta el consejo anterior. En el resto de los casos, los pendientes que elijas deben tener una forma contraria a la de tu óvalo facial.
Así, los rostros cuadrados deben evitar los pendientes de esa misma forma, mientras que les favorecerán los ovalados, redondos o alargados.
Por el contrario, las caras redondas tienen que decir adiós a los aros y demás formas redondas. Deben optar por formas alargadas e incluso cuadradas.
Los rostros con forma de triángulo invertido, jamás deben llevar pendientes triangulares o con figuras que sean más anchas en la parte superior y que terminen en pico, como los corazones.
¿Lo sabíais?
Os pongo esta foto de unos pendientes en plata y con forma de lágrima de Bijou Brigitte.
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