Hola!
Definitivamente los eventos tipo cóctel son los que más disfruto a la hora de vestirme. Considero que son las actividades más versátiles, porque van desde cocteles corporativos hasta salidas con amigas.
En estas ocasiones tenemos mucha libertad de escoger qué ponernos, usar los tacones más altos y sacar un ratito más para maquillarnos. A veces estas actividades suceden justo a la salida de la oficina, e incluso de manera inesperada y no podemos hacer mucho por cambiar el look, salvo retocar cabello y maquillaje.
Otros días el destino es más benévolo, y tenemos tiempo para cambiarnos. A veces dentro de la oficina o hasta en el auto, pero podemos desechar la ropa que nos acompañó durante esos días que parecen nunca acabar, con todos los imprevistos posibles.
Anoche tuve el privilegio de poder sacar un ratito para alistarme antes salir con mis amigas. Luego de un día muy complicado, lo que más quería era poder sentirme bella e incluso sexy para cambiar de ambiente y actividad.
Todo fue color negro. Se dice que es el color que la gente usa para ir a lo seguro y que no implica mucha creatividad. Sin embargo a mí me sigue gustando, me da confianza y me siento sofisticada.
Cuando usamos un atuendo monocromático podemos aprovechar para mezclar distintas texturas. La noche tibia me invitó a estrenar unos shorts con detalles de cuentas a los lados y una blusa de terciopelo con encaje y tirantes. El cabello no quería colaborar, pero un turbante lo logró disimular. Botines de cuero y un blazer estilo masculino por si enfriaba la temperatura.
Accesorios en plata y gris, desde el bolso animal print hasta los aretes congantes mexicanos.
Salud!
Valeza