El complemento multifuncional ideal para dar a tu casa ese toque especial…
La otomana está convirtiéndose en un accesorio muy bien valorado, así que no dudes en exhibirlo como una pieza importante en tu decoración. En Las Truquideas de Nuria te damos estos consejos para que le des tantos usos como necesites:
Amplía tus asientos: Estos accesorios son perfectos para los hogares pequeños, otorgando fluidez a los interiores, al ser fácil llevar de un lugar a otro los asientos y ahorrando espacio.
Reposa pies: éste es el uso más común de las otomanas.. sin embargo, aún así puedes hacerlo con estilo.
Para crear interés visual: Esto dependerá del diseño, forma y material de la otomana. Si crees que tu estancia luce muy aburrida puedes adquirir una otomana única que haga de punto focal en tu espacio.
Asientos ocultos: Si tu intención es conservar espacio libre sin sacrificar asientos para tus visitas la solución está en tener otomanas fáciles de ‘camuflar’ debajo de tu mesa de café o las auxiliares.
Mesa de centro o auxiliares: Escoge una que combine con tu paleta de colores y que empate con la textura de tus otros muebles… así lograrás que parezca todo salido de la mejor tienda de diseño.
También para los niños: Con toda su creatividad seguro le encontrarán un uso adecuado. Adquiere una otomana de diseño divertido que le sirva de asiento, de mesa, de banco y hasta de escritorio.
A pie de cama: Las otomanas son perfectas para colocarlas a modo de banco donde dejar las cositas por la noche.
Para almacenar: Actualmente existen muchos modelos de otomanas que sirven como baúles para guardar todo lo que te puedas imaginar allí donde lo necesites…
Fuente: http://casa.univision.com/
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