La verdad es que fue un acierto ir es un lugar maravilloso y eso que en cinco horas y con el calor que hacia ese día no nos dio tiempo a ver mucho, la isla es muy pequeñita 3, 5 Km se puede recorrer entera a pie si vas varios dias y tiene cuatro zonas principales, de norte a sur: Marina Grande, Terra Murata, Marina Corricella, Marina Chiaiolella.
La llegada del ferry es a Marina grande en el centro esta la iglesia de Santa María de la Piedad atravesamos el pueblo para ir a Marina Corricella.
Comer pescado en Procida es de obligado cumplimiento y lo que recomendaban era hacerlo en E la taberna de los versos de Neruda en la conocida película que lleva su nombre: Il Postino, traducida como El Cartero y Pablo Neruda. Ahora se llama, precisamente, La Locanda del Postino, nos sentamos incluso para comer, pero aparte del café el trato no fue precisamente agradable por lo que nos fuimos al local de al lado Restaurante Pizzeria Fuego que estaba al lado del mar, mas fresquito y el personal mas agradables y la comida superrica, un vino de la casa espectacular y bien de precio.
Marina Corricella es un lugar precioso que irradia paz y tranquilidad después de la cuesta de subida con el calor que hacia al descender por la escalera de Pennino te das cuenta que ha merecido la pena, cuando ves las fachadas de sus casas teñidas de distintos colores pastel ya que los pescadores pintaban la casa del mismo color que su barca para que se diferenciaran cuando entraban en el puerto y, del mismo modo, para que ellos reconocieran su hogar desde lejos al regresar de la faena.
Procida es una isla de película quien no ha visto “El Cartero y Pablo Neruda” de Michael Radford, “El talento del señor Repley” o la “Isla de Arturo” Cada año, durante 5 días, sus calles se transforman con el festival de arte y cine conocido como Il Vento Cinema, y por sus calles encontramos carteles informativos sobre películas y actores que han pasado por la isla..
Procida es básicamente llana, pero su parte más alta, con 91 metros sobre el nivel del mar, es Terra Murata. Es la parte habitada más antigua de la isla. Si subes por la Via Salita Castello desembocas en el mirador de Belvedere dei Canoni, en una explanada donde se conservan dos antiguos cañones.
Desde aquí se disfruta de las vistas más espectaculares de Marina Corricella con sus casitas coloridas y alegres y coronado por la iglesia de Santa María delle Grazie es fantástica.
Y llegó la hora del ferry para volver de nuevo a Nápoles, que poco tiempo para tanta belleza y paz volveré pero para pasar unos días.
Espero que os haya gustado. Seguiré contando el viaje
hasta el próximo post!!
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