Y para hacerlo, usamos una prenda que puede ser muy linda y sexy, pero que también es bastante incómoda, la verdad.
Pero en pleno siglo XXI, muchas mujeres han decidido dejar de usarlo, como ejemplo, tenemos celebridades como Kendall Jenner, Rihanna, o personas más comunes y corrientes, como mi mejor amiga.
El pequeño detalle es que sigue habiendo un pensamiento sexista en la cabeza de muchas personas, que piensan que debemos usar un brasiere, simplemente por tener senos.
Esto se debe a que el cuerpo de la mujer es visto como un terreno en disputa en el espacio público, de acuerdo con la socióloga de la Universidad de Carolina del Sur, Deborah J. Cohan.
Otro claro ejemplo de esto es que el derecho a elegir en torno al embarazo y el aborto sigue siendo un tema impugnado implacablemente.
“Básicamente todo lo relacionado con el cuerpo de las mujeres parece un juego justo para librar la guerra contra las mujeres y los avances logrados por el feminismo, así como para avergonzar a las mujeres”, dijo Cohan a Teen Vogue.
Por otra parte, los senos y pezones de las mujeres están tan sexualizados, que no solo tenemos que luchar por nuestros derechos, sino contra una sociedad de doble moral hipersexualizada que, al mismo tiempo, nos reprime.
Una publicación compartida por Lizzo (@lizzobeeating) el 4 de Jul de 2018 a las 8:43 PDT
Ahora, dejar de usar un brasier puede generar muchas preguntas: ¿se me caerán las chichis?, ¿me voy a lastimar la espalda? ¿Qué pasa si tengo muchas boobs?
Para sorpresa de muchas, no pasa nada si decides “quemar tu bra”.
Primero, lo más importante: las chichas con pechos grandes, que temen sufrir de dolor de espalda no tienen tampoco de qué preocuparse.
Aunque los sostenes son prendas técnicas cuidadosamente diseñadas para proporcionar apoyo físico, no son la única forma de prevenir o minimizar el dolor de espalda si tienes senos grandes.
“Hacer ejercicios para fortalecer los estabilizadores de la espalda, estiramientos y la buena biomecánica de la respiración siempre son útiles cuando se trata de la postura y el dolor”, recomienda Kristina Petrocco-Napuli, quiropráctica y miembro del Consejo de la Salud de la Mujer de la Asociación Quiropráctica Americana.
Lo mejor es hacer ejercicios y estiramientos que abran el pecho para evitar encorvarse y usar pesas para fortalecer los músculos de la espalda (teniendo cuidado de hacerlo adecuadamente). También sugiere practicar yoga o pilates, hacerte un masaje y consultar a un quiropráctico.
Ahora, no hay nada de malo con querer evitar que el pecho se caiga, pero, otra vez, un brasiere no es necesario para eso.
Contrariamente a la creencia popular, no hay evidencia científica de que el uso de un sostén evite que los senos caigan.
Los pechos se caen a lo largo del tiempo debido a la edad y la gravedad, y esto ocurre si uno usa un sostén o no.
Así que no te preocupes, no va a pasar nada si decides dejar de usarlo y también es completamente normal y no hay nada de malo con querer ese soporte.