No sé si a ustedes les ha pasado alguna vez, pero durante el fin de semana tuve una experiencia un poco interesante cuando fui al centro comercial y me empecé a probar la ropa…
…No sé si la industria de la moda esta en plan de ahorro de telas pero los tamaños de la ropa se han encogido en proporciones significativas.
Debo de confesar que llevo bastante tiempo de no comprar ropa de vestir ya que me he dedicado a comprar ropa deportiva, pantalonetas, licras, tenis, vestidos de baño y todos esos lindos accesorios creados por la monstruosa máquina del mercadeo que nos hacen pensar que necesitamos… un brazalete que brilla en la oscuridad? Peroooo por supuesto para que no me atropellen, LO NECESITO.
Así que se podrán imaginar mi sorpresa cuando después de estar con una rutina de ejercicios y de buena alimentación, llego a la tienda, agarro el pantalón de la talla y marca que siempre he usado y no me queda… Hmmm pensé yo, probemos una talla más… y nada! Luego otra talla más y todo parecía ir en picada ante mi mirada horrorizada en el espejo mientras asimilaba que ya no había una talla más grande y aun así no entraba en el pantalón.
Y empieza el camino por la Calle de la Amargura (literalmente) yo me decía pero que sucede? Será que en vez de bajar engordé? Será que estoy reteniendo líquidos? Que es???!! Y todos los cuestionamientos que surgen de nuestra imagen. Sin embargo yo estaba con una de mis mejores amigas (ella es delgada con un muy buen cuerpo) y la veo enfrentándose a la misma situación en su vestidor; y es ahí donde me dije: aquí algo raro está pasando. No entendía cómo estaba comprando el mismo pantalón que siempre compro, la misma talla y no me pasaba de las rodillas!,
Me di cuenta de algo, no soy yo. Es la industria de la moda que ha creando estándares imposibles de alcanzar y nos están lavando el cerebro para desviar la culpa a nuestra imagen. No es que estoy gorda, nooo, es que algún CEO en algún lado del planeta decidió yo soy la que me tengo que acomodar a sus pantalones y no al revés. Pude entender que no soy yo la del problema sino que ahora en la industria si antes eras XS ahora sos M; si sos talla S ahora sos L; y si sos L ahora sos XXXXL; atacando nuestra mente, espíritu y acribillándolo hasta que no quede nada más que un viaje decepcionante al centro comercial.
Debemos hacer escuchar nuestra voz y no permitir que PLUS size sea nuestra etiqueta… NOOOO somos plus size somos talla normal con imposiciones de XXXXS. Y no hacer pedazos nuestra imagen y nuestra autoestima. Y busquemos diseñadores y tiendas que comprendan nuestras figuras en vez de someternos a un régimen de inanición total.
Somos bellas, somos saludables y fuertes! Y si buscan inspiración les recomiendo lo siguiente:
AMÉNSE a ustedes mismas y a sus cuerpos.
Cuando compren una prenda si tienen algún sastre, llévenla a modificar para que les que quede como merecen.
No escondan su cuerpo bajo prendas flojas, son muy cómodas, pero no hacen ninguna favor a las mujeres curvilíneas.
¡Las tendencias no son para todos, tener estilo no es de copiar una tendencia, es hacerla tuya!
Hay modelos que ya están rompiendo los estigmas y si gustan echar un vistazo acá les dejos algunas de las cuentas de Instagram:
Nadiaaboulhosn
JadaSezer
Danikabrysha
Estén al pendiente del blog que les vamos a estar dando tips de moda para que le saquen el mayor provecho a sus prendas de acuerdo al tipo de cuerpo.
Feliz día todas nuestras fashionistas y recuerden…. We ARE fearless!
Sofi
Fuente: este post proviene de she is fearless, donde puedes consultar el contenido original.
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