Buenos días!
Sigo sin creerme aún la razón por la que escribo hoy, y es que veréis… Hace cosa de tres o cuatro semanas, un fantástico fotógrafo de León se puso en contacto conmigo para proponerme participar en un proyecto personal. Y la protagonista, asombrosamente, era yo.
Jamás me había hecho una sesión de fotos y la verdad, soy de esas chicas que tienen pánico a los objetivos. Nunca sé que cara poner, si sonreír, si estar seria… Bueno, ya os hablé un día de mis inseguridades. Sin embargo, hace una semana, creo que las perdí durante unas horas. Y lo mejor de todo es que no tuve que esforzarme, ni pasarlo mal; al contrario. Aunque era una sesión en la que cuál tenía que mostrar mi mayor introspección, cada poco echaba una carcajada de lo bien que lo estaba pasando. Fue muy fácil estar frente a su cámara, aunque me cueste asimilarlo.
Creo que en parte esa facilidad viene de que supo captar bien mi temperamento y cuál era el registro donde yo mejor sabía moverme. Así que cogimos el volante y nos fuimos a buscar un ambiente boscoso, frío y de cuento.
Os dejo un adelanto de su trabajo, algunas visiones de la primera parte del “shooting” en el bosque.
Sabéis? Cuando vi estas primeras fotos me di cuenta de que tanto Mrs. Shabby como yo procedemos de una antigua estirpe vikinga, creo que tenemos rasgos de lo más nórdico y eso se refleja en todo lo que hacemos!
Espero que os haya gustado este trocito de sesión, pronto os enseñaré el resto. Ah! Y aquí os dejo la dirección del estudio de Álvaro Ayarza, la persona que consiguió sacarme las fotos que nunca pudo hacer mi padre en 22 años! (Te quiero Papá):
http://aboca2wed.com/
Un besito!
y ahora… ¡SI ME QUERÉIS, SEGUIDME!
Fuente: este post proviene de Mrs. Shabby, donde puedes consultar el contenido original.
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