Se trata del exfoliante corporal mineral con sales del Mar Muerto. Como sabéis, el Mar Muerto tiene una gran densidad gracias a sus sales, lo que lo convierte en un excelente ingrediente para elaborar cosméticos. Si a esto le añadimos el poder hidratante de los aceites, tenemos un producto muy apetecible.
Contiene aceite de sésamo, leche, miel, aceite de argán, aceite de girasol y aceite de almendras dulces. Todo ello forma un conglomerado con la sal, que hace que al cogerla del bote tenga textura viscosa. El grano es de un tamaño medio, por lo que rasca sin hacer daño.
Nos lo aplicamos sobre la piel antes de la ducha, rascando en las zonas más propensas a las durezas, como son los codos, las rodillas o los talones. Después enjuagamos y ya está. Al contacto con el agua, el producto adquiere la textura de un aceite, dejando la piel suave e hidratada. Al salir de la ducha no hace falta aplicarnos ningún producto hidratante porque la piel está nutrida.
Como pasa con todos los productos de Mercadona (aunque este, repito, no sea de Deliplús) está el eterno problema del INCI. Este en concreto no contiene parabenos ni aceites minerales, ni derivados del petróleo. Pero como no viene en el bote, no sé deciros si tiene siliconas. La web del producto tampoco dice mucho más.
Viene en un bote de plástico y cuesta 3.80 euros. Lo tenéis disponible en todos los supermercados Mercadona.
¿Os gusta este exfoliante? ¿Lo habéis probado?
Fuente: este post proviene de Jornadas en el Tocador, donde puedes consultar el contenido original.
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