Cuidado con tu sostén

Por mucho, el sostén ha sido uno de los más grandes y efectivos inventos de la historia del hombre moderno.
Ajuste, protección, imagen… esto y más nos brinda un buen sostén, bracier o sujetador…pero si a tu mente vienen otras descripciones un tanto más incómodas o dolorosas, lo más probable es que estés usando erróneamente el tuyo y estas son algunas formas de identificarlo.
Marcas
Es muy normal que ciertas prendas dejen marcas sobre nuestro cuerpo, sobre todo si tenemos algunos kilitos de más o una piel muy sensible, pero de eso a dejar marcas muy intensas y que aparte duelan es signo de que estás usando una talla incorrecta de brasier,
Se te suba
El sostén se conforma por dos copas, dos tirantes y un broche que va de manera horizontal atado a la espalda, éste debe ir posicionado por debajo de los omóplatos, si el tuyo queda por encima o por debajo pero con el uso se sube, es otra seña de que no es el sujetador correcto, ya sea porque es de una talla mas chica o porque ya está gastado y ha perdido tensión.
Las copas quedan flojas
Un buen sujetador debe amoldarse a todo tu cuerpo, si éste se siente bien de los tirantes o el broche pero las copas no se rellenan, sigue buscando, a veces es difícil pues cada cuerpo es diferente en cuanto a anatomía y proporciones, pero afortunadamente hoy en día tenemos varias opciones de corte y material que nos permiten acercarnos más al ideal.
Tienes al límite las correas
Es bueno sacarle provecho a los objetos y esto incluye la ropa pero si tienes al límite os broches y correas puede ser por dos razones, una es que sea una talla más grande de la que necesitas o bien que ya esté tan gastado que solo así te ajusta….cualquiera de las dos es mejor cambiar de sostén.
Tienes que estarlo aflojando
Como mencioné en un principio, un buen sostén se debe sentir cómodo y no o contrario, por lo tanto si tienes la necesidad de estarte aflojando o acomodando el brasier a lo largo del día, no, no, ese no es el correcto para ti.
Los gorditos
Independientemente de tu peso, un buen sostén debe amoldarse bien al cuerpo así que si e sujetador que usas te saca los rollitos y gorditos puede que sea de la talla correcta pero no el modelo indicado, así que busca aquellos sin costuras, tipo top o con el puente más grueso.
Tus senos se ven raros
Otra razón para cambiar de sostén es si notas que la forma de tus senos es algo rara a través de la ropa, estos deben verse uniformes y redondeados si adoptan cualquier forma que no sea ésta, es hora de cambiar.

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