Algunas ideas que puedes poner en práctica una vez llegado el gran momento son:
Para tener una piel radiante:
Anticípate, los tratamientos "milagro" no existen.
Para mantener un cutis joven, terso e hidratado es importante beber dos litros de agua diarios. El agua, además de mantener la piel hidratada, ayuda a nuestro cuerpo a eliminar toxinas e impurezas.
Procura desmaquillarte correctamente para eliminar cualquier resto de pigmento y suciedad que pueda obstruir tus poros y aplícate después una crema hidratante adecuada a tu tipo de piel.
Una semana antes, más o menos, realízate un peeling para quitar impurezas y dar luminosidad a tu piel.
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En cuanto al cuerpo:
Si tienes todavía algún kilito de más acumulado del verano, procura quitártelo antes de que lleguen estas fiestas, así no te pondrás de los nervios cuando te pruebes el diseño que quieres lucir, y tampoco te pesará tanto cometer algún que otro exceso.
Un poco de ejercicio y cenas ligeras te ayudarán a conseguir estar a punto.
Acude a alguno de los balnearios urbanos tan de moda y apúntate a alguno de sus tratamientos relajantes. Los tienes desde los más tradicionales con chocolate, hasta los más exóticos con esencias frutales.
Llegó el día:
Pruébate con antelación lo que te vas a poner. es importante tenerlo decidido con antelación para no generar un estrés innecesario.
Si puedes, échate una siestecita de unos 40 minutos, te ayudará a relajarte.
Si tienes tiempo suficiente, un baño con espuma y sales y aceites aromáticos, además de relajarte, le darán a tu cuerpo una increíble suavidad y aroma.
Tómate tu tiempo para maquillarte y peinarte, así podrás retocarte las veces que quieras hasta que te veas perfecta.
Y ahora sí... ¡Estás lista para lucir genial en las fiestas!
Para terminar si quieres dar un toque adicional en tu cena de navidad, no viene de más pensar en algún regalo para tus invitados. Te dejo una página con una excelente colección de regalos de navidad para elegir
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